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Masacre de Alaska: Tribunal absuelve a coronel Chiroy y condena a siete soldados

El Tribunal de Mayor Riesgo “B” presidido por María Eugenia Castellanos resolvió absolver a dos y condenar a siete soldados acusados de delitos de ejecución extrajudicial por la masacre de siete comunitarios en la Cumbre de Alaska, perpetrada el 4 de octubre de 2012.

Por Ruda en colaboración con Prensa Comunitaria

A 11 de años de la masacre ocurrida en la Cumbre de Alaska, perpetrada el 4 de octubre de 2012, el Tribunal de Mayor Riesgo “B” dictó sentencia en el juicio que se realizó contra el coronel Juan Chiroy Sal, quién fue acusado junto a los soldados Edin Adolfo Agustín Vásquez, Dimas García Pérez, Abner Enrique Cruz Pérez, Abraham Gua Cojoc, Ana Rosa Cervantes Aguilar, Manuel Lima Vásquez, Marcos Chun Sacul y Felipe Chub Coc.

Uno de los más favorecidos fue el coronel Chiroy, a quien se le acusaba del delito de ejecución extrajudicial, pero el Tribunal consideró que el Ministerio Público (MP) no presentó prueba suficiente para acreditar que haya cometido dicho tipo penal. Por esa razón lo absolvió de cargos y ordenó su libertad inmediata. Misma suerte para el soldado Manuel Lima Vásquez, a quien se le absolvió por ejecución extrajudicial y ejecución extrajudicial en grado de tentativa.

En tanto, impuso condenas mínimas a Abraham Gua Cojoc y Edín Adolfo Agustín Vásquez, ambos encontrados responsables de homicidio culposo en grado de tentativa (2 años de prisión, rebajada en una tercera parte), mientras que, Edín Adolfo Agustín Vásquez, Ana Rosa Cervantes Aguilar, Dimas García Pérez, Marcos Chun Sacul, Felipe Chub Cob y Abner Enrique Cruz, se les condenó por lesión en riña en lugar de ejecución extrajudicial en grado de tentativa, a 7 años de prisión y 10 meses de prisión inconmutables.

La sentencia fue favorable para los acusados, debido a que la resolución fue contraria a lo pedido por la fiscalía y los representantes de las víctimas. En el debate habían pedido que se dictaran condenas de 16 a 25 años.

Al finalizar el debate, la defensa de las víctimas aseguró que analizarán la sentencia para poder presentar el recurso de apelación especial. “Como señalamos, sí hubo una actuación arbitraria y con uso excesivo de la fuerza por parte de miembros del ejército”, afirmó la abogada Lucía Xiloj.

Una sentencia injusta

Las viudas y familiares de las víctimas de la masacre de la Cumbre de Alaska, perpetrada el 4 de octubre de 2012, esperaron por 11 años que se aplicara la justicia por la ejecución extrajudicial de siete manifestantes y el intento de ejecución extrajudicial de 50 personas. Una justicia que no llegó, debido a que la condenas no van acorde a lo que esperaban.

El 4 de octubre de 2012, la organización de los 48 Cantones, de Totonicapán, manifestaba pacíficamente en el lugar conocido como la “Cumbre de Alaska”, en el kilómetro 169 de la ruta Interamericana, contra el alza a la energía eléctrica y en defensa del derecho a la educación.

Las víctimas de esa masacre fueron los manifestantes Santos Hernández Menchú, José Eusebio Puac Baquiax, Jesús Baltazar Caxaj Puac, Arturo Félix Sapón Yax, Jesús Francisco Puac Ordóñez, Rafael Nicolás Batz y Lorenzo Isidro Vásquez.

El caso se entrampó por varios años porque luego de que el juez Miguel Ángel Gálvez ligara a proceso al coronel Juan Chiroy Sal y a ocho soldados por los delitos de ejecución extrajudicial y ejecución extrajudicial en grado de tentativa, en 2013 la jueza Carol Patricia Flores modificó los delitos por otros menos graves, incumplimiento de deberes y homicidio en estado de emoción violenta.

Pérdidas económicas y daños en la salud

En el debate declaró Adán Pedro Sapón, quien fue herido de bala en una pierna durante la movilización que terminó con la masacre de la Cumbre de Alaska. Ha sido operado en varias ocasiones debido a las heridas que sufrió, la última vez fue hace tres meses y medio.

“Yo pido justicia, de igual manera necesitamos un apoyo económico”, señaló Sapón, quien refiere que perdió varios bienes debido a los gastos médicos de una operación en un centro hospitalario privado en Quetzaltenango.

Sapón indicó que tiene hijos pequeños y no hay quién lo apoye para cubrir sus necesidades. “Le pedimos al Tribunal que nos eche la mano para poder sacar a mi familia adelante”, señaló.

Debido a la masacre perpetrada por militares los planes que tenía con su familia no los pudo llevar a cabo, relató.

Conoce más detalles acá:

https://prensacomunitaria.org/2024/02/justicia-la-principal-peticion-de-las-victimas-de-masacre-en-cumbre-de-alaska/