Desde presidentes que usan las redes sociales para hostigar a periodistas hasta guerras donde informar significa arriesgar la vida, en Guatemala y en el mundo ejercer el periodismo sigue siendo una profesión marcada por la violencia y la impunidad estatal. Las periodistas feministas no se eximen de estas vulnerabilidades incluso sufren más ataques por informar con perspectiva de género. Hoy el derecho de la libre expresión y pensamiento desata odio, miedo y violencia para que las verdades no salgan a la luz.

Por Ana Alfaro

Presidentes que usan sus canales de comunicación para atacar a periodistas, países en donde informar es sinónimo de poner la vida en peligro por cubrir una guerra o conflictos de poblaciones con el crimen organizado, son las principales amenazas contra quienes se dedican a esta profesión.

El pasado 2 de noviembre, se conmemoró el Día Internacional para poner fin a la impunidad de los crímenes contra periodistas. A pesar que esta fecha busca concientizar sobre estos hechos contra los comunicadores, la violencia digital y física, persecución y criminalización continúa contra ellos. 

Las periodistas feministas que informan con perspectiva de género tienen también fuertes datos en las estadísticas. Según la Unesco, 73 % de las periodistas en el mundo ha sufrido violencia en línea y esto se intensifica cuando se abordan temas de género (49 %), política y elecciones (44 %) y derechos humanos (31 %), de acuerdo al informe The Chilling: global trends in online violence against women journalists. 

El gobernante de Argentina, Javier Milei, ha publicado al menos 65 mensajes en la plataforma X contra la periodista Julia Mengolini, quien ha sido crítica del presidente, luego de que en julio de este año circulara un video hecho con inteligencia artificial que acusa falsamente de incesto a la comunicadora. “El presidente del país se ha burlado de la víctima”, señaló el diario El País al publicar la noticia.

"Casi todas las periodistas feministas en Argentina han sufrido ataques", dijo Luciana Peker, a la agencia de noticias Efeminista. Peker es periodista y está en el exilio por acoso y persecución. Ella recibió el primer ataque cuando publicó una nota en el sitio InfoBae sobre que las armas aumentan el peligro de los femicidios. “Te mereces ser la próxima víctima de femicidio”, decía la amenaza que recibió.

En Guatemala, las amenazas, intimidaciones y ataques contra el periodismo salen de comentarios de diputados, exfuncionarios de gobiernos pasados e incluso de jueces señalados de corrupción. 

El presidente Bernardo Arévalo prometió la elaboración de la Política Pública para la Protección de Defensores de Derechos Humanos, que sería la base jurídica para la creación del mecanismo de protección para periodistas. Sin embargo, el avance ha sido demasiado lento.

En la audiencia pública ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) el 22 de julio, sobre criminalización, Elvin Díaz, director de la Comisión Presidencial por la Paz y los Derechos Humanos (COPADEH), indicó que la política aún se encuentra en revisión, pero no especificó una fecha en la que vaya a ser publicada, de acuerdo con información publicada por Prensa Comunitaria.

En Guatemala no existe ninguna garantía de protección del Estado para que la prensa pueda ejercer su trabajo en una época en donde se ha arreciado el acoso judicial y la criminalización por medio de casos presentados por el Ministerio Público (MP). 

Mary Lawlor, Relatora Especial de la ONU sobre la situación de personas defensoras de Derechos Humanos, ha expresado su preocupación por una campaña de desprestigio contra periodistas de Prensa Comunitaria. Además, ha exigido al Estado garantizar su labor y proteger el derecho a la libertad de expresión y prensa.

Según el informe “Bajo el Radar: Censura Digital en Centroamérica”, de 2023, Guatemala registró 47 ataques cibernéticos contra medios independientes entre 2021 y 2023, con un aumento del 60 % en sabotajes a plataformas digitales. Prensa Comunitaria ha recibido 10 ataques, y Ruda dos en lo que va de este 2025. Se ha logrado obtener información que confirma que el último ataque se realizó desde El Salvador.

Periodista en prisión

En Guatemala no solo se amenaza la vida de las y los periodistas, también la cárcel es un peligro latente como el caso del exdirector del desaparecido medio escrito elPeriódico, Jose Rubén Zamora, que desde hace tres años se encuentra en prisión. “Hay un aumento del uso del derecho penal para encarcelar a periodistas”, dijo su hijo José Carlos Zamora a The Guardian en septiembre de este año. 

Las acusaciones contra él derivan después de que elPeriódico publicó información de corrupción del gobierno del expresidente Alejandro Giammattei. Zamora tiene dos procesos penales y tres hechos señalados por el Ministerio Público (MP) que lo mantienen en la cárcel. 

La primera acusación es por un supuesto ocultamiento del origen de Q300 mil, dinero que le fue incautado en efectivo, y el segundo por obstrucción a la justicia, alegando que habría conspirado para entorpecer una investigación por lavado de dinero, hecho presuntamente ocurrido en 2013. Además, en un tercer caso se le señala de falsificación de firmas en boletas de declaración jurada para viajar al extranjero, por lo que el MP solicitó abrir un nuevo proceso por uso de documentos falsificados.

Según la Unidad de Protección a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos (UDEFEGUA), solo en 2024 el netcenter fue responsable de 3 mil 051 agresiones digitales contra defensores de derechos humanos.

UDEFEGUA on Instagram: "👻 No todo lo que ves en redes es real. 👁️ Detrás de muchos perfiles hay un plan: Los net centers usan cuentas falsas para desinformar y atacar a quienes defienden derechos."

Los netcenters son responsables de 3,501 agresiones digitales a personas defensoras de derechos humanos en 2024, según el Informe UDEFEGUA 2024. Descubre cómo proteger tus derechos y mantenerte a salvo en línea.

https://www.instagram.com/udefegua/reel/DQe2qM1gkkr/

Prensa Comunitaria y Ruda identificaron en 2024, 14 formas de violencia contra periodistas, entre estas: difamación, acoso judicial, restricción de cobertura, intimidación, ciberataque, ofrecimiento de sobornos, desaparición, asesinato y amenazas.

La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), señaló cinco patrones de violencia contra periodistas: amenazas, obstáculos en el acceso a la información, restricciones a la cobertura periodística, criminalización de periodistas, presiones económicas a medios de comunicación y ataques en redes sociales, especialmente a través de estructuras señaladas como “netcenters”.

A pesar de las intimidaciones, la criminalización, el hostigamiento y las amenazas, los periodistas continúan informando dentro o fuera de su país. Su trabajo de informar ha permitido que no solo exista una historia sino muchas. Incluso, personas han muerto como el caso de Mariam Dagga y cinco colegas más que murieron en un ataque de Israel contra el hospital Nasser, en Palestina.

Más detalles en este enlace:

https://prensacomunitaria.org/2025/09/el-mecanismo-de-proteccion-para-periodistas-la-deuda-que-mantiene-el-gobierno/